TOCINO DE CIELO SOBRE TARTA DE QUESO

Espectacular, sobre todo si sois golosos. Es una tarta que cunde muchísimo, con una porción pequeña tenemos suficiente.
La tarta es de Las recetas de mamá. Me pareció ideal para darle un pequeño homenaje a mi padre, que le encanta el tocino de cielo.
Durante su eleboración tuve algunos problemillas, pensaba que la tarta iba a salir fatal, pero cuando la desmolde a la hora de servir, su aspecto era muy bonito y el sabor tremendamente bueno.
Debido a los problemas que tuve, y como me salió estupenda, voy a poner la receta tal cual la hice yo, pero si queréis ver la receta original pues para la web de mamá. 
En la foto se puede distingir las 2 capas diferentes de dulce, la anaranjada es el tocino de cielo, exquisito y la blanca el pastel de queso, que no necesita mucha azúcar para contrarestar el dulce del tocino.
Mi padre repitió y Maribel, que desde aquí le mando un beso muy fuerte, se llevó un trocito para que su hermana lo probara, decía: " No es lo mismo decirlo que probarlo".

Ingredientes:

Tocino de cielo:
6 yemas de huevo.
1 huevo entero.
125 ml. de agua.
250 de azúcar.
Caramelo líquido Royal para caramelizar el molde.


Tarta de queso:
1 tarrina de queso philadelphia.
200 gr. de nata.
4 cucharadas de azúcar.
2 huevos pequeños o 1 grande.
Medio vaso de leche.
1 cuchara de postre de maizena.
Ralladura de limón.


Elaboración:
Empezamos haciendo el tocino de cielo.
Esta tarta se hace al baño maría. La podéis hacer al horno, igualmente al baño maría, poniendo en el recipiente donde la vayáis a hacer, dentro de una bandeja más grande, donde podáis poner agua, para que haga el baño.
En mi caso la hice de la otra manera, que es en la olla rápida. Yo tengo la Fussioncook. Si la hacéis como yo en la olla rápida, debe ponerse en una flanera o molde que tenga tapa para cerrar.
Bueno, lo primero que haremos será poner en un cazo el agua y el azúcar, para hacer el almíbar del tocino de cielo.
Lo pondremos a fuego medio, durante 10- 15 minutos, removiendo  constantemente. Resevamos, dejamos templar.
En el molde donde vayamos a hacer la tarta, ponemos el caramelo líquido, como si fuera un flan. Reservamos.
En un bol, batimos las yemas y el huevo, con un tenedor o con unas varillas manuales,  no nos conviene que tenga espuma. Reservamos.
Pasados unos 10 minutos desde que hemos reservado el almíbar, ya debe estar templado, y ahora vertemos el almíbar en el bol de los huevos, vamos mezclando. Si véis que el almibar se ha solidificado, no os preocupéis, lo ideal es que sea líquido, en mi caso se solidificó, costó un poco de mezclar pero el resultado final fué buenísimo.
Una vez tengamos ya el almíbar incorporado a las yemas y al huevo mezclado, vertemos esta mezcla en el recipiente que hemos caramelizado, donde se hará la tarta. Reservamos en la nevera, para que coja cuerpo, unos 15 minutos.
Empezamos con la tarta de queso. Simplemente batimos todos los ingredientes con las varillas eléctricas, turmix o cualquier otro robot de cocina.
Sacamos del frigorífico la mezcla de tocino de cielo y vertemos con ayuda de una cuchara puesta boca abajo, y poco a poco, la masa de la tarta de queso, encima del tocino. Se  hace con la cuchara al revés, para que no se vierta con fuerza, para que pierda la cascada y no se nos mezclen las 2 masas. 
En este momento, si nuestro recipiente va a la olla a presión lo taparemos y lo pondremos en la olla con la suficiente agua para que llegue a la mitad del molde.
Si lo hacemos al horno, pondremos nuestro molde con la tarta, dentro del recipiente donde pondremos agua, hasta la mitad del molde.
En la olla a presión normal, 20 minutos despúes del pitido de vapor.
En fussion yo lo puse, manual, 50 minutos, válvula cerrada.
En el horno, 1 hora, calor arriba y abajo, o ventilador, 190º. Tendremos que mirar cuando acabe el tiempo del horno, que más o menos esté cuajada, puede temblar un poco, pero no en exceso. Este tipo de tartas, van cuajando pasadas las horas.
Sacamos el molde, dejamos enfriar a temperatura ambiente.
Cuando este completamente frío, lo metemos en la nevera, 24 horas. 
Es ideal para dejar el postre preparado el día de antes, una faena menos.


Cuando vayamos a servir, lo sacamos un rato antes del frigorífico. En el momento de emplatar, lo desmoldamos y presentamos en la mesa.
Yo lo acompañé con nata montada y un sirope de chocolate.


Buen provecho !!!