Cuando he mirado la nevera y he visto los 2 quilos de calabacines que compré, he dicho, algo hay que hacer con esto, que no sea una crema. También tenía unos filetes de pollo, así que juntándolo todo y añadiendo un poco más, esto es lo que hemos comido hoy.
Mil hojas, porque el calabacín, aunque no lo he cortado con mandolina, lo he hecho muy fino, a rodajas. Después he superpuesto en capad, el calabacín, el pollo y los tranchetes. A quedado un plato rico, engalanado, de aprovechamiento, que no desmerece nada, de verdad.
Ingredientes 4 personas, con un primero, ensalada...:
3 calabacines no muy grandes, pelados, aunque dejando vetas verdes, y cortados a rodajas muy finas.
2 cebollas pequeñas.
Pechuga de pollo en filetes.
Tranchetes o cualquier otro queso en lonchas que tengáis a mano.
Aceite de oliva virgen extra.
Sal.
Pimienta
Elaboración:
Cortamos las cebollas a trozos muy pequeños. En una sartén con un poco de aceite, ponemos a pochar la cebolla. Salamos.
Cuando la cebolla esté pochada, vertemos los calabacines, y dejamos que se pongan tiernos, unos 20-25 minutos a fuego suave. Salamos y salpimentamos de nuevo.
Cuando esté hecho este sofrito, reservamos.
Salpimentamos los filetes de pechuga, y en la misma sartén del sofrito, con un poco de aceite la marcamos, vuelta y vuelta. Reservamos.
En una fuente apta para horno, cubrimos la base con la mitad del sofrito de calabacín, ponemos la mitad de las pechugas encima, cubriendo todo, una capa de tranchetes, el resto de calabacín, pechuga y por último cubrimos de nuevo con el queso.
Metemos en el horno, hasta que haga chup-chup y lo veamos gratinado.
¿ Fácil, no?.
Nota:
El resto de calabacines los he usado para otra receta, que tampoco tiene desperdicio !!
Fenomenal! una forma diferente de comer pechuga de pollo fileteada:)
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